NADIE ME LO DIJO

De tus manos que saben 

recorrer acantilados. De la gracia

de tus palabras que no saben algo

distinto más que hablar de amor.

De tu mirada difícil de evadir. De esos

labios húmedos que hacen de mi boca

una presa. De tu liberal forma de amar que

hace un ritual y teje momentos inolvidables.

De tu noble corazón,
de la magia que logras

porque  como rey Midas,
todo lo transformas 
y haces que mi ser brille.

Del vino en la improvisada mesa,
de todas esas gentilezas. 

De tu sinuosa figura 
y de las sensaciones que alientas.

De la lava que derramas

desde tus entrañas.

De tus promesas cumplidas. 

Por  ser toda una mujer y
una maravillosa madre.

A mi nadie  me lo dijo.
ni el viento,
ni la voz que en ocasiones 
nace de mis silencios ni

las ramas melancólicas
del eucalipto.

Ni el sol ni la luna.
Nadie me lo dijo.

Yo supe todo eso de ti,
porque así lo viví.