NIVELES

Un aprendiz de escritor
tenía la mala costumbre 
de escribir sus pensamientos
y la repentina inspiración, 
en las hojas interiores
del libro en turno que leía.
Lo que por supuesto el garabato
allí permanecía por siempre.

Sin embargo,  su gran sorpresa
fue que al hacerlo en una 
obra de Borges,
Letra que escribía,
letra que inmediatamente  desaparecía.

Quizás el gran genio de la literatura
rechazaba ese acto tan atrevido
e irreverente de un aprendiz.



Comentarios

Entradas populares