PINTANDO UNA SONRISA

Un artista intentaba
pintar  una bella
sonrisa sobre el lienzo.
Sin embargo no lo lograba.
Cada una que bosquejaba
le parecía fría, fingida
sin asomo de vida
o alegría.

Un día se sentó en la
banca de un parque. Y
Miró que pasaba una pareja
con un niño tomado de la mano.

El padre detuvo a un vendedor
de dulces, y le compró una
pequeña golosina de hermosos
colores,y se la entregó.

Entonces, el niño
abrió  sus grandes ojos negros,
y exclamo - !guaaaaaaaa! 

E inmediatamente
en el  rostro se pintó
una divina sonrisa.

Posteriormente,
el artista fue a su estudio,
y recreó aquel 
momento único.

El hombre
es capaz de crear felicidad. Y
no se requiere mucho, sólo
verdadero amor, aderezado
con algo de dulce.

Dejen que los niños
se acerquen a mi. 
Mateo 19:14