DESEMPOLVANDO UN LIBRO

He olvidado como iniciar un poema
una rosa al  principio de la primavera
un amor forzado sin llanto, no hay tema
que surja en forma natural, solo la espera,

envenenada por la realidad cotidiana,
simple, caduca con la fe erosionada
y el arrepentimiento de perderte una mañana.
Es difícil encontrar el verdadero amor, a ti en madrugada,

Llama viva que no se apaga.
Hoy me descubrí limpiando el libro empolvado,
tan lleno de recuerdos, risas y una ráfaga
cruzó mi corazón como saeta, supe entonces

que aquello en la lejanía
no fue una epifanía
alguna vez fue amor.
Recordé que apagaste mi fiebre
cuando en realidad merecía morir.

Hay vidas paralelas, supongo
que al igual que ami, la saeta hiriente
del recuerdo, te lleva al pasado
donde ambos estuvimos enamorados.

Tengo días viendo llover a través
de la ventana, mi sexo en calma
muerto como una roca,
la lluvia arrecia y yo me duermo
mientras el temporal pasa.