LA CARRETA





La vida pesaba mucho. Y
no te dabas cuenta 
hasta que un día quedaste tirado
en el camino.

 La vida pesa mucho
si otro conduce la carreta.


 ¿Hacia Qué rumbo?


 Puedes ir muy campante
de pasajero en  carreta ajena.
Te dejas llevar, guardas silencio
en el trayecto de la vida
para no molestar al conductor.
Incluso dormitas, platicas y hasta
sientes cariño por quien conduce.
Te sientes "bien".
 Pero un día despiertas
solo, y  tirado en un camino
aislado. Y Sin carreta
que conducir.

La vida pesa mucho, pensé.


Buscar  una carreta propia,
es la respuesta, tomar
las riendas de la vida 
y aprender a amarnos.

Y decidir con sabiduría
quien te debe
a acompañar en el viaje es crucial.

Imaginas un viaje largo
con la persona equivocada?



Buscar la propia carreta,
Pero sobre todo
el rumbo que se debe seguir.

Comentarios

Entradas populares