AMARTE SÓLO HOY

Las personas suelen prometer
amor eterno, pero yo no pude
hacerlo, sería como mentirte
porque la eternidad es efímera
para los seres humanos.

Entonces te dije, hagamos
un trato, que tal si sólo
te amo hoy, intensamente
desde lo  más profundo de 
mi corazón. Y me permites
deslizar mi humilde existencia
en la oscuridad llena de luz
de ese par de hermosos ojos negros.

Y deleitarme con los latidos
de tu corazón que asemejan
el compás de las gotas de lluvia
que inicia en una tarde alegre
de verano.

Y no te lo dije pero lo pensé
mientras te miraba sonreír,
y si te amo sólo por hoy,
mientras rebotaba el eco de mi voz
en el corazón de ambos. Esto es
esperanza, como el ciego que desea
mirar el cielo azul y el ocaso del
del horizonte, el sediento que anhela
un poco de agua aunque en el intento
fallezca. Y acaricié tu mano
con  mis dedos,
ah! vaya fusión de halo de
nuestras alma.

Es posible ver el alma?
si, yo vi la tuya
hoy por la tarde.

¿te di una flor?
no, pero te dije
sólo hoy te amaré.
Y mañana otra vez repetiremos el
milagro de vernos  y  sentirnos, 
de soñarnos en un camino que ninguno
ni siquiera ha trazado, ni planeado
no sabemos a donde desembocará,
la cascada del destino,
pero confiamos, confiamos uno del otro.

Cuando te veo caminar, y tu no 
te das cuenta, siento lo que me 
hace sentir bien. El aroma de
las rosas en un amanecer a la
orilla de la playa, el verde 
del inmenso mar de pinos en
esa montaña que nunca he visitado,
la arena fresca a la orilla de la
carretera repleta de florecillas
silvestres de brillantes colores
amarillos y fuego. La penumbra
que pinta un cielo en el desierto
repleto de un universo de blancas estrellas,
veo una mañana sin el temor que no
nos deja vivir ni crecer, veo a la incertidumbre
derrotada por una esperanza galopante
como quijote soñador.

ayer te dije algo. ¿Lo recuerdas?
Mi cobardía, es un caballero valiente
que duerme, y que sólo el beso
de lo más sagrado lo despertará.
Yo no temo te dije, porque sé
que el caballero allí está, siempre
listo con la espada desenvainada
y el corazón  presto para defenderte
por siempre.

De que sirve decir que te amo eternamente.
Mejor permite amarte profundamente solo
el día de hoy. 

Eres mi ave, la que busca el néctar
producto de mi amor,
de mi cuerpo que es la flor del jardín
que Dios nos regaló
para amarnos  eternamente,
pero un día a la vez, día
a día, sin promesas, sin decretos
ni una línea en un  papel
que es pirita 
que es oro de los tontos.

Me gusta escucharte decir que 
me amas, me gusta
escuchar tu sonrisa
que es caricia cual rocío.



Hoy te amé,  y terminó el día.
Y ya lo ves lo que provocas,
mientras la noche  se despide,
siento que te amo nuevamente
mientras el milagro de amarnos sigiloso
va despertando.